miércoles, 2 de septiembre de 2009

Hoy no se divisa porqué un país soberano no pueda decidir libremente sobre esta materia, y otros sí lo puedan hacer

Coterráneos:

Creo que se debe eliminar en lo publicado, por no ser presentable la frase:

...."en sectores adyacentes a la cordillera (ojalá pegadito a la Argentina)"
....

Para nosotros, lo anterior no quiere decir que de repente como chilenos no nos guste la idea de poner nerviosos a los argentinos, por el peligro de eventuales desperfectos en las plantas, pero esa solución no es presentable desde el punto de vista humano, y de estrategia, porque los críticos encontrarán el lado débil para descargar allí su artillería. En todo caso, por lo que he sabido alguna vez los argentinos han querido instalar un depósito de desechos nucleares en un lugar cercano a nuestra frontera.

Estimo que se deben mantener como ideas en este tema de suyo controversial:

1.- Que la o las plantas estén lejos de todo centro de población;

2.- Que estén instaladas en terrenos lo más firmes posible, y con las mayores seguridades;

Es un hecho no desmentido, que Chile actualmente no tiene recursos energéticos suficientes para su desarrollo, y que con nuestros vecinos no se divisa que nos puedan proveer de ellos con seguridad de que no nos cortarán el suministro a medio camino.

Por tanto, habrá que llegar a la energía nuclear como una necesidad, ya que las energías no convencionales, como la eólica, geotérmica, solar y otras, se divisan por ahora solo como marginales y no podrían en el corto ni mediano plazo darnos independencia. Tendremos que propender con todas nuestras fuerzas a estas últimas, pero por ahora debemos tener claro que no solucionan el problema de Chile, sino que parcialmente, en forma minoritaria.

Todo lo anterior es sin dejar de hacer todos los esfuerzos para utilizar al máximo la energía hidroeléctrica en la que sí tenemos potencial, claro eso si que respetando el ambiente y la legislación medioambiental del país.

Finalmente: Igual, no nos cerramos a la idea de que tengamos la posibilidad de que nuestro país desarrolle conocimientos y técnicas que le permitan en un caso dado usar la energía atómica como disuasión ante posibles ataques extranjeros. En esto Argentina y Brasil nos llevan mucha ventaja, (no me cabe dudas que algo están avanzando más allá que el uso de la simple energía nuclear, como lo hacen abiertamente USA, Rusia, China, Francia, Israel, y otros países) hoy no se divisa porqué un país soberano no pueda decidir libremente sobre esta materia, y otros sí lo puedan hacer.
Aceptar esa situación, es aceptar una humillante discriminación, e implica reconocerse inferiores, con una suerte de libertad a medias o capitis diminutio que nos impide decidir por nosotros mismos. En todo caso este último tema, habrá que ventilarlo más adelante, porque por ahora si la vieja Sara y ese gringo hipócrita se oponen a todo, obvio que encontrarían tema para atacar si se plantea la posibilidad de equilibrio bélico o defensa nuclear.

Atentamente, Higinio Morales


Nos vemos en Atacama.